viernes, marzo 16, 2012

Martín Palermo - El adiós al ídolo

Esta nota la hice a fin del año pasado para Domingo, el diario de TEA. Ya sé que va a hacer casi un año que Palermo se retiró pero nunca está de mas. He aquí mi humilde homenaje al más grande.



            En julio del este año pasado se retiró una de las mayores figuras del fútbol profesional argentino y del Club Atlético Boca Juniors: Martín Palermo. A los 37 años y luego de 19 en su recorrido por el deporte. Terminó una carrera plagada de goles, records y miles de anécdotas que quedarán en la historia. Un jugador de una mística especial que sabía llegarle al corazón de los hinchas de su club (y a los contrarios también).

                El Titán comenzó su carrera en 1992 en el club Estudiantes de la Plata, si bien pasó solo cinco años allí, tiene al pincha en su más alta estima ya que es oriundo de la ciudad de La Plata. Debutó en el año 1997 en el club xeneize y con ellos ganó todo: Torneos Clausura y Apertura, Libertadores, Sudamericana, Recopa e Intercontinental. “El partido con el que debuté en Boca fue contra Cruzeiro (Brasil) el 3 de septiembre de 1997 y ganamos 1 a 0. Estaba muy nervioso y con mucha ansiedad por salir a la Bombonera”, comenta Martín. 


                El 9 formó parte de la época más exitosa de de Boca de la mano de Carlos Bianchi quien, además de ser un referente para el jugador, le colocó a Palermo uno de sus apodos más famosos: el optimista del gol. Con el equipo consiguió seis títulos a nivel nacional (dos Clausura y cuatro Apertura) y ocho a nivel internacional (dos copas Libertadores, una Intercontinental, dos Sudamericana y tres Recopa Sudamericana). Entre 2001 y 2004, “El Titán” se fue a jugar a Europa donde formó parte del Villareal, Real Betis y Deportivo Alavés (segunda división), todos del fútbol español.

           Su historia en la selección argentina es corta pero dejó su huella. “Me hubiese gustado jugar más partidos, pero lo que viví con la selección lo disfruté muchísimo”, declara. Debutó en febrero de 1999 en un amistoso con Venezuela y después de julio del mismo año tendría que esperar diez años para volver a ponerse la camiseta celeste y blanca. Bajo la dirección de Diego Armando Maradona, Palermo convirtió ante Perú el agónico gol que le daría la clasificación a Argentina al Mundial Sudáfrica 2010 y además participó de ese torneo (y todos seguro recordarán el gol a Grecia luego de un rebote).

            Durante su paso por el fútbol sufrió varias lesiones graves, Palermo las define como los peores momentos de su carrera. La primera fue en 1999 cuando se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla derecha, lesión que le traería problemas en el futuro. Luego, jugando para el Villareal en Europa, fue a festejar un gol con la hinchada y el peso de la gente provocó que se cayera una pared en su tobillo y se lo fracturara. En 2008 vuelve a lesionarse la rodilla derecha. Pese a las muchas altas y bajas de su carrera, “El Loco” siempre salió adelante, dando ejemplo de fuerza y perseverancia.

          Palermo es el hombre récord en muchos sentidos: con 237 goles convertidos en el Club Atlético Boca Juniors ostenta el título de goleador histórico. Por otra parte, se coloca junto a José Francisco Sanfilippo en el quinto puesto de los goleadores del fútbol argentino en primera división. Entre otros de sus logros están: ser el debutante mundialista más veterano en convertir en copas del mundo (gol a Grecia en Sudáfrica 2010), hacer un gol de cabeza desde 40 metros, convertir un penal con los dos pies, entre muchos otros. Entre los más desafortunados se encuentra el haber errado tres penales en un mismo partido, lo cual sucedió en la Copa América de 1999 y lo colocó en el libro Guiness de los récords.

                Respecto a su retiro él explica que se fue porque creyó que era el momento justo para tomar esa decisión después de todo lo que había vivido. El último partido en la Bombonera del Titán fue el 12 de junio de 2011 ante Banfield, el estadio entero lo ovacionó de pie y el club le rindió homenaje. “Recuerdo a la gente emocionada cantando, disfruté cada momento del partido, el reconocimiento que me hicieron en el final con la fiesta, los regalos, mi familia, mis amigos. Va a ser un recuerdo imborrable”, expresa.

                El partido despedida del 4 de febrero de este año en el estadio de Boca fue épico. Lo que sigue para Palermo todavía no se sabe; incursiona actualmente en el automovilismo pero también expresó sus deseos se ser director técnico. Él dice que, cuando sea el momento oportuno, va a comenzar con el proyecto de dirigir. Solo resta esperar.


           Martín Palermo es uno de los ídolos indiscutidos del fútbol argentino, se supo ganar a la gente sea cual sea el color de su camiseta. Ya se publicó un libro con su historia redactado por él y el periodista Miguel Bossio y la película de su vida es un proyecto que está en marcha. Su humildad, carisma y fuerza lo colocaron en lo más alto de la estima popular. Es, fue y será el 9 más recordado del deporte.



¡Gracias por TANTO Titán!

No hay comentarios: